No todo proyecto debe transformar la ciudad. Algunos tratan sobre la escala íntima de la vida cotidiana—los espacios a los que volvemos, los rincones que hacemos nuestros. Esta reforma de apartamento en Madrid encarna esa idea: una intervención modesta donde el diseño no busca la grandiosidad, sino la claridad, la eficiencia y el confort.
Una Reconfiguración Cuidadosa
El proyecto se centró en reorganizar lo esencial:
Una nueva distribución del baño, optimizando el espacio y la circulación.
Una cocina renovada, afinando tanto la funcionalidad como la materialidad.
Nuevo almacenamiento integrado, creando orden dentro de unos metros cuadrados limitados.
Una simplificación espacial, eliminando lo superfluo para revelar un entorno más limpio y coherente.